Muchas personas me dicen a diario que desean cambiar su vida, pero no saben por dónde empezar, cómo hacerlo, se sienten muy mal y ni siquiera saben por qué o de dónde viene exactamente el malestar emocional.
Si estás leyendo este artículo, seguramente eres una de las personas que desea hacer cambios y obtener resultados distintos. Sin embargo déjame decirte algo muy importante: “para obtener un cambio en cualquier área, hay que empezar a escuchar el lenguaje del cuerpo”. Tu cuerpo sabe bien lo que ocurre y cómo superarlo, pero el cuerpo habla en un lenguaje distinto al de las palabras. El cuerpo habla mediante sensaciones, emociones y síntomas. Es un lenguaje no verbal.
Está comprobado científicamente que las emociones tienen un impacto en nuestra biología, de hecho, el Dr. David Hawkins en su tesis sobre la conciencia humana demostró que cada emoción tiene una vibración al igual que la materia la tiene.La Dra. Candace Pert también muestra que las emociones negativas interrumpen la regeneración celular.
Cuando experimentamos un impacto emocional, lo asociamos a alguna parte de nuestro cuerpo y este nos da algún tipo de señal para comunicárnoslo, por ejemplo, dolor de estómago, de cabeza, problemas para dormir, etc. Cuando haces caso omiso, tu cuerpo lo soluciona trabajando de forma adicional, pero realmente la biología nos está comunicando que requerimos solucionar el problema.
¿Cómo empezar el cambio ?
Para empezar a entender el lenguaje de tu cuerpo, te recomiendo realizar un proceso de concienciación:
1. Date cuenta de cómo te sientes, conéctate con tu cuerpo.
2. Identifica tus emociones.
3. Exterioriza lo que sientes, evita reprimirlo.
4. Recuerda que tienes defectos, evita exigirte ser perfecto.
5. Identifica posibles situaciones o personas que hayan desencadenado el impacto emocional.
6. Examina lo ocurrido de la forma más objetiva.
7. Evita buscar culpables y/o victimizarte.
8. Recuerda que el otro refleja una posible situación tuya irresuelta.
9. Indaga qué relación inconsciente tiene lo ocurrido contigo.
10. Respira profundo y vuelve al tiempo presente.
11. Ejercita procesos de mejoramiento continuo. Por ejemplo, ? click aquí desactiva pensamientos limitantes
Existen muchos tipos de cambios. La mayoría de las veces buscamos hacer un cambio cuando estamos desesperados, enfermos, estresados. Cuando algo va mal. Sin embargo, hoy te invito a que te acostumbres a realizar actividades y procesos que te ayuden a renovarte continuamente.
La vida está en constante cambio. Así como cambias cada cierto tiempo tus sábanas, tus toallas, compras ropa nueva o limpias la casa. Es indispensable que mantengas cuerpo mente y espíritu alineados y para ello también necesitas hacer cambios internos que te permitan vivir en bienestar, en plenitud y en disfrute.
Practica esta afirmación: “ YO LE DOY LA BIENVENIDA A LOS CAMBIOS Y FLUYO CON ELLOS EN AMOR”.
Suscríbete a mi lista para recibir más información
Un gran abrazo, nos leemos prontito ❤!
0 comentarios